Existen sobradas pruebas de que un fallo judicial adverso ni siquiera hace cosquillas al gigante corporativo MicroSoft. Sin embargo, las molestias que le ocasionan algunos veredictos realmente le ponen de mal humor.
Este ha sido el caso de la sentencia publicada hace algunos días por la cual una corte distrital de los Estados Unidos, prohíbe a Microsoft a comercializar en todo el territorio de la Unión, cualquier tipo de software que utilice, total o parcialmente, la tecnología patentada por la canadiense i4i para el procesamiento de textos.
Obviamente esto afecta de frente a Word, producto estrella del Office de la firma. Y como el juicio se iniciara en 2007, la cifra que indemniza a i4i por daños asciende a los u$s290 millones.
Por lo tanto, mientras Microsoft prepara la apelación a la medida, debe abstenerse de vender dentro de los Estados Unidos (uno de los mercados tecnológicos globales de más alto consumo) sus productos Office por considerar que violan los derechos de una patente anterior. Esto incluye software capaz de abrir archivos .XML, .DOCX ó .DOCM que contengan XML personalizada.
No es esta la primera vez que Microsoft es acusado de plagio en alguno de sus desarrollos, y seguramente no será la última. Todavía debemos esperar la apelación, su revisión y una nueva sentencia en firme.
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